
En un país sin proyecto nacional y casi sin proyectos relevantes de ingeniería e infraestructura, parece fatuo o ingenuo hablar de trenes de alta velocidad. No obstante, estimular la imaginación tal vez nos ayude a entender mejor nuestro pantanoso estancamiento. Más del 97% de los viajes interurbanos en México se llevan a cabo en autotransporte carretero; el resto, en avión. En esencia, esta es la estructura modal del transporte interurbano de pasajeros, apuntalada por un subsidio masivo a los combustibles automotrices, que en 2011 superará los 170 mil millones de pesos. Tal cantidad es diez veces mayor al gasto del Estado en ciencia y tecnología, cuatro veces mayor al gasto en medio ambiente y agua, más de cinco veces el gasto en seguridad pública, más del doble del presupuesto en comunicaciones y transportes, 80 % del gasto en educación, seis veces el presupuesto de la UNAM, y casi 100 % más del presupuesto en salud.
Independientemente de la perversión fiscal que implica, el esquema de subsidios y la estructura modal del transporte a la que subyace inducen una ineficiencia energética extrema, y emisiones desbocadas de gases de efecto invernadero (la fuente más importante en el inventario nacional de emisiones). Desde luego, es también notable la distorsión que imponen al desarrollo urbano, promoviendo asentamientos digitales extendidos y dispersos a lo largo de carreteras, y el abandono y decadencia de las zonas centrales de las ciudades.

Los trenes de alta velocidad tienen la capacidad de acelerar notablemente no sólo la movilidad interurbana, sino la productividad, la generación de empleos y el desarrollo económico de las ciudades a las que sirven; además de sus ventajas ambientales y en materia de emisiones de gases de efecto invernadero. Las estaciones, ubicadas en áreas centrales de las ciudades, promueven la revitalización urbana, proyectos inmobiliarios de alta densidad, y usos mixtos de vivienda, servicios y oficinas, lo que contribuye a generar ciudades compactas acopladas a sistemas intermodales de transporte público y a movilidad peatonal y no motorizada, así como mercados laborales más accesibles y eficientes.
Desde luego se requeriría del liderazgo del Gobierno Federal en materia de planeación, financiamiento, ejecución y operación, y la creación de corporaciones público – privadas con capacidad de coordinar la adquisición de derechos de vía, y el desarrollo de predios para estaciones y centros intermodales (y en el DF, combatir al acechante ambulantaje). Todo es ahora un desvarío onírico, en este México atascado. Pero, tal vez un gobierno de coalición.….
esto lo propuso desde la campaña el Lic. Andrés Manuel López Obrador, y los panistas y priistas se revolcaron de envida y coraje pues el HOMBRE si tiene AMOR por México y los Mexicanos y va a Ganar una vez Más las elecciones de 2012 con el apoyo de los Mexicanos que verdaderamente amena su patria. y lo de los trenes será una realidad y no solo eso el PROGRESO de México será para todos. saludos
ResponderEliminarlástima que perdió tu patético peje mesías,y volvió a quedar demostrado que es un pésimo perdedor que de amor al país tiene nada... y lástima por ti que te tragaste toda su sarta de mam....
EliminarUn poco tardía quizás, pero mi opinión como Argentino y amante de ese gran país, tierra madre de mi hijo mayor, es que todos nuestros países tienen el potencial de mostrar un nuevo camino al mundo "civilizado". El camino es viable, pero para emprenderlo es necesario acabar primero con la corrupción publica y privada. Nuestros países tienen la potencia económica de hacer trenes y por qué no, aviones, propios y mejorar las tecnologias existentes, de la misma manera que los chinos hicieron para lograr sus redes de Alta Velocidad. Pero nuestros gobernantes prefieren entregar a China la soberanía de las ideas y los proyectos, porque nuestro sistema no prevé el mediano ni el largo plazo al pensar en el bienestar de su población (y a veces ni siquiera tienen el pudor de admitir que tal bienestar esté tan lejos de sus planes. En Argentina, para dar en ejemplo, la producción de una chacra tomatera en Mendoza deja al chacarero menos de una cientocincuentava parte del precio que paga el ciudadano en boca de venta y las 149 partes restantes son absorbidas por la corrupción, sin pasar por las garras de un sistema leonino de impuestos que por mil veces menos, deja en la cárcel al más pintado. Con solamente el valor de la producción de hortalizas de una sola cosecha se podría pagar varias veces la deuda externa que nos abruma de hace cincuenta años. Y en un par de años podríamos tener nuestra propia red de trenes de Alta Velocidad dando servicio gratuito para el progreso de nuestra nación.
EliminarEstoy de acuerdo con la idea de utilizar el transporte ferroviario, en la época en que Porfirio Díaz estuvo al mando del país, vio que era necesario comunicarlo y encontró una buena forma con el ferrocarril, que lastima algunas de estar estén destrozadas y no se le halla dado continuidad..seria una grandiosa propuesta
ResponderEliminarPropuesta claro está, del unico candidato que se ha atrevido a decir que va a hacer cuando sea presidente y a la gente que lo va a acompañar en su mandato:
ResponderEliminarAndres Manuel Lopez Obrador.
O me equivoco?
Muy interesantes tus ideas. Me parecen impresionantes las cifras ya que no tenía idea que el "subsidio masivo a los combustibles automotrices" fuera un gasto tan fuerte para México. MI PREGUNTA, porque todo parece positivo con la eliminación de este subsidio, es: ¿Qué problemas traería al País el carbon tax y la eliminación del subsidio? ¿Cómo se combatirían? ¿Habría inflación?
ResponderEliminarLos trenes de alta velocidad no solo son caros para el gobierno, también para los usuarios. Lo que se necesita es primero hacer una red de trenes estilo RENFE (España) y luego conectar las grandes ciudades. La propuesta de AMLO es estúpida para ser honestos, un tren de alta velocidad donde lo propone de nada serviría.
ResponderEliminarDe verdad que hace falta un transporte tal cual (llámese tren, o tren de alta velocidad), en México ya no se tiene tal cual como transporte "publico" si no solo privado y eso hace perder mucho tiempo y dinero a los ciudadanos actuales, espero que algún día se den cuenta de eso que de verdad se necesita pero de !YA¡ innovar el sistema de transporte actual en México.
ResponderEliminarashh por eso mexico esta como esta, jamas podra igualarse ni a japon o Corea..
ResponderEliminary mientras sigan creyendo las estupidas ideas de los candidatos. que nunca han vivido en un primer mundo xD
La propuesta esta muy buena y mexico pasaria a ser un pais d primer mundo, pero cren que al mismo gobierno le combendria si el es el que controla caminos y puentes federales, todo ese ingreso diario de autobuses que ban de estado a estado se perderia, entonces cren que al gobierno le guste perder tantos ingresos diarios
ResponderEliminar